Cuando yo estaba adolescente una vez escuché una expresión muy graciosa que rezaba: “Vamo pa’ la fiesta! 🤗, Vennnniiimmmooss de la fiesssstaa”; para representar que esperámos con ansias que lleguen los días que más nos gustan pero se pasan tan rápido como un pestañeo y de vuelta arrastramos la chancleta porque no soportamos regresar a la “asesina” rutina.
Para los panameños una de las festividades en donde eso se ve marcadísimo es para época de carnavales, ya sea los que les gusta el jolgorio, culecos y desenfreno como aquellos que aprovechan los días para ir a la playa o viajar, no hay nada mas sabroso que disfrutar de aquello que te hace relajarte y sentirte feliz.
Siempre me quejo porque siento lo relativo del tiempo entre aquello que me aburre y lo que me gusta.
Tannnta gente esperando el verano y ya lo que queda es casi nada, tanta gente esperando carnavales y ya se pasó el jolgorio, empieza la cuaresma, para los creyentes tiempo de reflexión y penitencia, ofrecimientos a Dios por todas las buenas cosas que nos da.
Vienen bajando las consecuencias de las acciones , comentaba hace poco en redes que:
1) Regresan todos aquellos que se pelearon con la pareja para irse de parranda y ahora vuelven con el rabo entre las patas buscando clemencia.
2) Regresan los que se fueron solos y conquistaron pareja.
3) Regresan los que se fueron en pareja y regresaron solos.
4) Regresan las mujeres “descabezadas” que se fueron solas y regresan bien acompañadas pero sin pareja.
5) Regresan los que se gastaron hasta el último centavo que necesitaban para pagar sus compromisos y los útiles escolares de sus hijos.
6) Regresan los que no saben ni con quien se involucraron.
7) Regresan los que cerraron ciclos y hasta negocios.
8) Regresan los que descubrieron que ya no están para tanto arrepinche y deciden retirarse.
9) Regresan los que ya tomaron esa decisión en años anteriores y vienen de las playas, las casas de campo y otros países de pasear pacíficamente.
Hay algunos que no regresan porque no fueron a ningún lado y decidieron quedarse enpijamados viendo películas y cerdeando los 4 días en la ciudad.
Sabían ustedes que para enamorarse y dedicarse tiempo con alguien que te interesa y deseas estar, no es necesario tanta multitud fiestera.
En fin; los días libres de febrero no son normales jamás; siempre traen consecuencias buenas o malas pero las traen, cada quien sabe como disfrutó su carnaval…..
Luego llega la semana santa que da por terminada oficialmente la temporada seca en nuestro país.
Ustedes no saben cuanto me nutre el sol brillante que pica, con la brisa que tumba y la hierba seca bajo mis zapatos. Y las noches de cielo despejado lleno de estrellas, uff! De esas ni hablemos.
Si yo tuviese la posibilidad de decidir cuantos meses fueran de temporada lluviosa y cuantos de temporada seca la relación sería al reves de la actual; aunque nos cocinemos.
Espero que todos disfruten tanto el verano como yo y puedan lograr el bronceado del verano, el amor del verano, el cuerpo del verano y todo lo que el señor verano quiera regalarles…
Empezamos nuevamente todo el ciclo que nos lleve de la fiesta a la reflexión…