Etiqueta: sabiduria

Una de las cosas más valiosas que me ha regalado la vida al llegar al cuarto piso es la experiencia y la sabiduría; que solo se ganan con el tiempo y algunas situaciones no tan agradables.

Parece mentira pero se nos afina la mirada y el instinto y de lejos nos olemos a quienes vienen con intenciones torcidas; claro que hay su par de profesionales en «torcedera» que a veces nos echan tierra en los ojos pero tampoco es que tardamos tanto en darnos cuenta, jo! Y eso si emberraca no darse cuenta enseguida porque sientes que te ven la cara.

Yo ya había vivido mi par de experiencias con gente que enseñan el cobre, pero ahora que estoy en esta onda del blog y conozco más gente he descubierto unos «tamales calientes picantes» que para que contar. Lo que a algunas nuevas amistades les ha tocado vivir es como de telenovela.

Bastante seguido me pongo a filosofar con flamantísimo, o con JR mi hijo o una buena amiga sobre el misterio que es el ser humano.

Es de verdad tan sencillo , ser buena persona, no jugar vivo, no robar, no hacerle malas pasadas a la gente, no plagiar ideas, no hacerte pasar disque por «amigo» para sacar provecho; todo eso forma parte de la podredumbre que hay dentro de todos; con la diferencia que algunos lo mantenemos cerrado con candado y botamos la llave y otro son los mismos Pálpatin (personaje malvado de Star Wars) en persona.

Lo triste de todo es que entre más éxito y más brilla una persona le salen más y más envidiosos hasta debajo de las baldosas, gente que creíste conocer se salen con tremendos síndromes de Maquiavelo.

Sin ánimos de que piensen que estoy sentida o nada parecido les digo solo a manera de comentario que he tenido varios eventos de personas para las que fuí desechable; pero a las finales pasé la página y aquí estoy «shine bright like a Diamond» como dice la canción. Creo que no soy mujer que tenga grandes pertenencias para envidiar pero algo les arde.

Antes me daba faracho, moridera y depre, y así fue como llegué a convertir mi casa en monasterio y mi núcleo familiar en fortaleza; y soy muy celosa de quienes se acercan. Me manejo con cautela y sagacidad y me ha dado resultados positivos.

En este caminar también me he encontrado con gente bastante compatible conmigo; porque he aprendido que en vez de que me trasmitan historias, me trasmitan sentimientos. Lo que siento, percibo, esa vibra que emana de cada quien es lo que hace que desee seguir compartiendo o que me aleje. Algunos tan mala sangre que me provoca salir huyendo cuando los veo.

Dentro de esa gente compatible, he encontrado algunas que tienen como una luz, algo bonito, agradable, candidez, gente que de repente me ayuda en algo sin pedirme nada a cambio, solo porque son buenos, otras que creen en la «ley de causa y efecto» (convencidos de que lo que den, recibirán tres veces); otros que ya han partido al paraíso y han dejado huellas tan grandes que son recordadas por el buen manejo de sus vidas.

Una de esas personas me impactó porque ha sido la primera en mi vida que me ha descrito con pelos y señales el sentimiento que le da cuando una «amistad» le hace alguna trastada o desaire, que siguen siendo amigos pero algo especial muere (ya no es lo mismo, pierden valor); y es exactamente el mismo sentimiento que me ha envargado. Cuando ella me describió lo que sentía era como si me estuviera leyendo el pensamiento a mí. Y otra cosa en la que somos idénticas es que tenemos un organigrama gigante mental con grupos y diferentes niveles de amistad o conocidos.

Siempre digo que soy afortunada porque ese don de poder elegir con quienes me siento plena y felíz no todo mundo lo tiene.

Para mi es sumamente importante tener muy pocos amigos de confianza, los cuales aportan a mi vida valores; que estar rodeada de un poco de gente antagónica e hipócrita, que donde das la vuelta te apuñalan peor que pavo navideño. Soy frontal y transparente y considero que es una de mis virtudes; lo que ven es lo que soy y jamás diré algo para quedar bien, si algo no me parece lo digo y si no lo digo callo y sigo mi camino, pero en donde preguntes sabrás enseguida lo que pienso.

No soy un angel, ni pretendo, mucho menos persignada, pero tampoco soy capaz de disque hacerme amiga de alguien para sacarle provecho, o de inventar cosas para sacar plata a costilla de otros, ni de apoderarme de ideas o proyectos que no son míos; me da terror jugar sucio, porque siento que después todo eso se regresa y tengo hijos. Debe ser por esas razones que no he alcanzado la cúspide en muchos sentidos, pero lo prefiero. Una vez para mi cumpleaños hace como dos años hice un giro indebido y me trabaron  mi boletón (me agrié yo misma el cumple) jejejej aprendí mi lección y ahora soy más juiciosa manejando; eso solo un ejemplo de que aprendo a los golpes a veces.

Creo que parte de ser espiritual no es solo estar en sintonía con el creador sino hacer el bien sin mirar a quien; no meternos en lo que no nos importa y por último vivir y dejar vivir. Respetar la naturaleza y no abusar de la vida que nos han regalado. Mantener siempre siempre el cerebro conectado con la boca y hacer filtro para que no se nos vayan a salir vómitos verbales que luego no podemos recoger.

Para mí era sumamente importante hacer esta reflexión no solamente porque diario veo casos y cosas decepcionantes en la noticias, precisamente porque el mundo está perdiendo humanidad y el egoísmo está cobrando cada vez más terreno sino porque hablando a groso modo han notado que en el mundo hay suficientes recursos y dinero para que ni uno solo de los habitantes pase hambre o sed o viva en la total miseria??, eso lo único que indica es que algo estamos haciendo mal; uff! Y tan claras que nos dejaron las instrucciones para manejar este planeta con éxito.

Para terminar le pido a todo aquel que NO tenga intenciones buenas mantengase alejado, porque tengo antivirus para ellos. No me hacen falta.

Y todo el que tenga luz y sabiduría es bienvenido.

Consejo: Usted se da cuenta quienes son sus verdaderos amigos; cuando está atravasendo malos momentos, recuerdelo siempre. El 80% de los que se dicen amigos sueltan el plumero.

El poder pensar así y trasmitirlo a ustedes es la libertad que me regala ser una Cuarentidiva…

Besitos 💋💋