Esperanza…

Hoy amanecí con esperanza; la misma esperanza que tienen otros de que las cosas van a mejorar en todos los sentidos y al final mejoran.

Esta cuarentena ha sido la mejor universidad de la vida que me ha podido regalar el destino.

Me ha servido para confirmar que soy una mujer 100% casera, que todos los años de encierro a los que me sometió mi madre en adolescencia, pensando que me “cuidaba y protegía”, sirvieron para algo, acostumbrada a estar en casa y a distraerme con lo que hay dentro de la casa Jajajajaja por fin llegó la respuesta jajajajajaja que risa.

A todos mis amigos desesperados por salir, les he dicho sin tapujos: “eso es porque eres callejero(a) carajo!!”.

Por otro lado estar con mis hijos 24/7 ha abonado para su entrenamiento de vida que ya Flamantisimo y yo estábamos llevándoles, pero ahora es como una maestría. Saben hacer de TODO en casa, no necesitan asistente del hogar.

El teletrabajo es una locura fuera de serie, para  el que nadie a nuestro alrededor, tiene manual de procedimientos.  Pero la mayoría de la gente a quienes he preguntado me dicen que ha sido una sensación un poco estresante, al parecer los jefes piensan que como los empleados (no me gusta llamarles colaboradores) están en casa es porque andan relax, por ese motivo se creen con derecho llamar, mandar correos y chatear a todas horas incluyendo altas horas de la noche y madrugadas, claro que hay excepciones y estoy segura que muchos irán regulando porque es conveniente.  Pero no me cabe la menor duda de que luego de esto; más gente trabajará desde casa, como en países de primer mundo.

Demostración clara de que a veces compramos más de lo que necesitamos, cosas sencillas como comprar ropa, zapatos, bolsos, maquillaje, los hombres con algunos hobbies que no son nada baratos, se convierten en gastos que de poco en poco suman buco. Yo ni había reparado en eso y no significa que dejaré de comprarlos, pero sí haré elección antes de comprar sin pensar y eso que no soy compradora compulsiva como un par que conozco.

Mis pobres salchis Amber y Cabo (principalmente él) super desesperado por salir a dar su vuelta a la barriada, como hacía todos los días, ha tenido que adaptarse a salir varias veces al patio al día, sin saber que ocurre (como hacerlos entender?); y gracias a Dios que tenemos patio, porque miles de mascotas están encerradas en apartamentos , y aunque la gente no crea, ellos también se deprimen.

El homescooling; definitivamente si en algún momento lo llegué a contemplar de lejos, ahora con certeza lo he descartado totalmente; definitivamente no fui hecha para educar, para eso es necesaria la vocación y la paciencia de Job, que yo no tengo. Por el amor a mis hijos lo hago, ha sido una de las facetas más duras.

Una de las situaciones más llamativas fue darme cuenta quienes son nuestros verdaderos amigos, quienes nos quieren de verdad aunque no nos hablemos todos los días, la distancia a ayudado para que muchos de los que estábamos lejos nos acercáramos más y también lamentablemente darnos cuenta de gente que uno creía eran buenas amistades han demostrado que no lo eran tanto, afortunadamente son menos de la mitad de una mano o sea que en porcentaje versus los otros es nada. Lo menciono solo para hacer un equilibrio, y que si otros lo han vivido igual que flamantisimo y yo sepan que en este momento esta ocurriendo más de lo que pensamos.

La gente ha perdido filtros y se ha desinhibido bastante y lo están manifestando cada dos por tres, lo vemos diario en redes sociales, que al parecer es una válvula de escape. A diferencia de lo que muchos piensen que es negativo, yo pienso que es positivo porque de este modo cada quien se presenta tal como es, y con toda franqueza, prefiero que la gente sea transparente y me diga lo que le gusta y lo que no siempre dentro del marco del respeto. Valoro la gente auténtica que no hable a espaldas.

Económicamente preocupados como todos, porque estamos viviendo un período de incertidumbre y solo de pensar que luego de todo esto lo que viene son más deudas y cuentas por pagar, solo pienso que hay que meterle el pecho y ni modo, echar para adelante sin meterle mucha mente.

Me confieso y van a pensar que estoy loca porque ahorita lo que la mayoría de las mujeres casadas quieren es salir huyendo del marido y los hijos y creo que quieren que terminen las restricciones de vuelos entre países para comprar un pasaje e irse a la conchinchina pero solas o con sus amigas jajajajajajajajaja (por supuesto es mera exageración mia).

Yo a diferencia de mi pensamiento anterior, creo que estoy gozándome tanto la paz de mi hogar, el amor y compañía que todos nos tenemos; estoy un poco ansiosa porque sé que cuando nos toque regresar a las diferentes rutinas, mis hijos a sus colegios, universidad y flamantisimo a su trabajo voy a vivir una especie de luto, me va consumir la soledad y eso si me mata. Tocará en ese momento replantearme y hacer un reseteo en mi cabeza para adaptarme a lo que venga como he hecho mil veces antes.

Ojalá al final del camino luego de tanta pagadera de deudas nos quede algo para hacer dos paseos, uno en familia porque mis hijos han aguantado la cuarentena como unos campeones, sin quejarse y se merecen un premio; y otro con flamantisimo porque la relación merece ser cultivada sin los hijos, solos él y yo; recordarnos que somos uno y disfrutarnos mutuamente.

Sigo aquí sana, salva, bendecida y agradecida gracias a una gran ESPERANZA….