El arte de Traicionar

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Escuchamos esa palabrita y nos da como dolor de barriga, porque nos parece despreciable, baja, rastrera; sin embargo mis belloooosss es una acción que está (por alguna razón inexplicable) en el ADN del ser humano, porque estamos claros que los animales no se traicionan jamás verdad?? Ajá, y eso que nosotros somos los inteligentes y los racionales.

Dicho esto, lo segundo que debemos tener clarísimo es que todos hemos traicionado y todos hemos sido traicionados alguna vez, es una palabra que se asocia mucho a las relaciones amorosas; pero es practicada en todos los ámbitos de nuestra vida, o sea que lo de rastreros es “amplio”.

Por supuesto, ahora muchos de ustedes me puedes salir con que depende de las circunstancias y de las personas y de los hechos, pues sí, pero no deja de ser una terrible traición para alguien, que empieza a tener sentimientos de molestia, ira, decepción, en ocasiones hasta violencia y venganza, todos en algún momento nos hemos sentido así.

Pero adivinen quién es el culpable de que se produzcan las mayores traiciones del mundo? La lengua, sí sí, por eso es que en algunos libros sagrados hablan de ella como la única parte de nuestro cuerpo imposible de controlar.
Le digo constantemente a mis hijos: “quien habla de más, siempre está metido en problemas” y eso es una ley de vida, lo sé porque me ha pasado cientos de veces, yo me pongo como el mejor ejemplo. Saben la cantidad de veces que “confío” en alguien que se ha vendido como bueno o leal y comento ideas, proyectos, deseos, sueños por cumplir y resulta que el bicho(a) rastrero(a) lo ejecuta y se lleva todos los méritos y luego arranca por la vida y cuando me ve, me quita la cara con indignación como si yo le debiera algo cuando en realidad es al revés? Uff! Tengo para escribir un libro; porque yo de tonta al final del camino, sigo confiando en que en este mundo los buenos somos más.

Los que les acabo de mencionar son los “traicioneros aprovechados”, siii porque existen otras categorías.

Existen los “traicioneros cobardes”, esos son los que te venden sin piedad con tal de salvarse el pellejo. En ocasiones si les queda algo de conciencia te piden disculpas y se excusan diciendo que no tuvieron otro remedio, al menos con eso lavan un poco su miseria y se sienten menos mal.

Que me dicen de los “traicioneros maquiavélicos”, los que ya traen el plan completo hecho, saben exactamente lo que quieren de ti, como desean lograrlo y van paso a paso ejecutando hasta que alcanzan su objetivo y se largan.

Y que tal los “traicioneros frontales” (son los menos, pero los hay), esos te dicen en tu cara lo que van a hacer, como lo van a ejecutar, es más, te menosprecian diciendo que él puede conseguir lo que desea de ti por otra vía, pero igual te usa y te lo dice para que no te sorprendas.

Y el “traicionero traicionero”, ese es el que ni su madre puede confiar, esa persona que te jura y te perjura que con él puedes contar hasta la médula y jamás te va traicionar ni en un millón de años y en cuanto das la vuelta es el primer Judas que te manda a volar sin piedad.

El más común de todos es el “traicionero económico”; es esa persona que mientras tu le des algo de valor está contigo hasta la muerte peeeeeeroooo que no haya más dinero de por medio por parte de otra persona, porque te vende sin pensarlo dos veces y se va con el que le de más. (Este tipo de manzanillo es el que abunda alrededor de los políticos).

Otro que también es común es el “traicionero vicioso”, ese es otro que te jura con su vida su lealtad, hasta que el vicio y adicción hacen que no solo te traicione de palabra sino también de acción, ese es capaz de robarte para alcanzar su objetivo.

Hay muchos más pero creo que con alguno de estos nos hemos encontrado en algún tiempo de nuestras vidas, por supuesto no puede quedar por fuera el “traicionero sentimental” que es la persona de la cual te enamoras que en algún momento se siente atraído por otra persona y chao que te ví. (Sobre este hay miles de aristas que pueden dar luz sobre las razones por las cuales te traicionó, pero en este momento no hablaremos de ellas).

Como dije antes, si mantuviésemos la boca cerrada y habláramos solo trivialidades nos iría mejor y sufriríamos menos traiciones.
Siempre he dicho que las más dolorosas NO son las de los amores, las traiciones más dolorosas son las de familiares y personas que creíste realmente tu amigo, lo que viene acompañado de eso es una decepción y una desilusión tan grande que puede llegar a hacer merma hasta en nuestra autoestima. La pérdida de la confianza es lo peor que le puede pasar a una relación amistosa o familiar, queda ese trauma.

Por otro lado que podemos hacer con la traición tipo boicot que nos hacemos todos los días al no llevar una alimentación saludable? Qué podemos hacer cuando tenemos vicios que no podemos dejar? Qué podemos hacer cuando sabemos que debemos chequearnos en el médico y no vamos? Qué podemos hacer cuando sabemos que podemos hacer más en nuestro trabajo y nos quedamos así? Qué podemos hacer cuando le prometemos algo a nuestros hijos o pareja y no les cumplimos? Qué podemos hacer cuando nos ponemos una meta y no la alcanzamos por frescura?

En fin, miles de porqués a la persona que más debemos AMAR, pero a la que más traicionamos diariamente => NOSOTROS MISMOS.

Creo que el antídoto perfecto para bajar un poco el nivel de las traiciones (que nunca van a faltar dada nuestra naturaleza), es:

1) Ser dueños de lo que callamos (o sea cerrar la boca y no hablar ni compartir de más), ya que de otro modo seremos esclavos de lo que decimos que siempre siempre será usado en nuestra contra.
2) Tener pocos amigos cercanos, entre más gente tengas a tu alrededor más exposición y posibilidad hay de ser traicionado, porque caras vemos y corazones no sabemos, y ojo! Que no aplica eso de “lo conozco hace muchos años”, que va! Una persona te puede ir traicionando toda tu vida a cuenta gotas y tu ni te enteras, porque está allí para eso, para sangrarte emocionalmente, usualmente te envidia y siente la necesidad de estar allí sacándote toda la información que pueda.
3) El conocimiento da poder, usted mantengase informado de todo y de todos, no sabe en qué momento le va tocar utilizar esa información para defenderse o salvarse.
4) Hay que concentrarse, enfocarse y no permitir que nada ni nadie nos distraiga de las metas u objetivos, en la medida que estamos ocupados trabajando en alcanzar lo que deseamos menos tiempo nos queda para opinar, conversar, comentar, compartir, lo que a más nadie le interesa. Las indiscreciones están a la orden del día y en el momento que una de esas se salga de control o contexto, se va a la porra tu proyecto.
5) Aunque les parezca raro, ser espiritual, meditar, orar, estar concentrado en tu interior y en la fuerza superior que te mantenga equilibrado es un éxito. En mi caso oro todos los días para poder mantenerme enfocada y callada, tener un centinela en mi boca es la promesa diaria. Porque al decir lo que siento, pienso y planeo me hago vulnerable y por ende a mi familia también; así que debo estar pilas.

Enseñanza de todo lo aquí expuesto:

Nadie que desee hacerle daño o le tenga envidia, se lo va decir de frente jamás, esa persona se va vender como la mejor del mundo y hasta le va hacer favores para que usted se sienta agradecido, las mujeres tenemos un sexto sentido que apenas conocemos a alguien algo no nos cuaja de esa persona y aun así usualmente la tratamos, cuando esa persona traiciona es algo que esperábamos.

Las acuerdos más grandes, las guerras más fuertes, los contratos más importantes, los acuerdos más relevantes, las alianzas más peligrosas de este mundo se han quebrado gracias a uno que puso en práctica el arte de traicionar….

1 comentario en “El arte de Traicionar”

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