El mal necesarioooo🤷🏼‍♀️

Cuando mi generación viviamos aun en casa de nuestros padres, que todavía existían nanas interioranas que se encariñaban con los niños y prácticamente los  criaban como propios y habían asistentes del hogar que hacían todos los oficios con juicio, y respeto hacia sus jefes, súbitamente se convertían como en parte de la familia y para nuestros ojos todo en casa marchaba sobre ruedas, todo se daba por sentado (camas hechas, comida lista y calentita, ropa limpia y planchada en el closet lista para usar) iban más allá; hacían recorderis de cosas por hacer y algunas eran hasta alcahuetas (mi primera nana fue una de las personas que mas he querido, me crió los primeros años) y luego llegó mi otra nanita que todavía es inseparable con mi mamá, ya son muchos años y muchos cuentos, hasta nos ha ayudado cuidando los hijos mios y de mi hermana cuando hemos tenido urgencias. Esa persona de mucha confianza a quien le entregamos lo más preciado con total certeza de que me puedo ir a la «conchinchina» y estará todo perfecto. 

Bueno siguiendoles el cuento; cuando nos casamos pero aun no teníamos hijos, fue hasta cómodo tener solo una persona que iba algunos días a hacer la limpieza profunda el resto de los días el apartamento era para los tórtolos.

La cosa se puso buena cuando decidimos traer a nuestros pequeños al mundo y absurdamente pensamos que eran los mismos tiempos en que crecimos y lo más importante; creímos que correríamos con la misma suerte de nuestras madres por quienes nuestras nanas sentían hasta admiración.

Que va!! Muy poco nos duró la ilusión cuando nos dimos cuenta que ya las interioranas se habían llenado de mañas y malicia, que las buenas decidían quedarse criando sus propios hijos aunque pasaran hambre y que además un número plural de «rakatakas» habían decidido entrar en el mercado laboral doméstico de nuestro país.

Como si todo esto fuera poco empezaron a llegar extranjeras indocumentadas que huyendo de la mala situación económica en sus países se infiltraban en las filas del maravilloso mundo de la crianza de niños y atención doméstica en general. Mismas que llegaron muy modositas y poco a poco fueron mostrando el cobre y sacando garras con las cuales trepan a cualquier costo. Cuentos es lo que hay para hacer varias enciclopedias.

Por supuesto, y antes que me vayan a caer en plancha, les digo que estoy consciente que no hay que generalizar y que no todas son iguales pero sí debemos aceptar que son mayoría arrolladora.

Les puedo contar cosas terribles de nuestras criollas actuales, como que: maltratan desde bebes hasta niños en edad escolar, que roban desde comida (lo más común) hasta joyas, que dejan chiquillos solos en casa para ir no se donde hacer mandados, que utilizan a niños y mascotas para encontrarse con el quita frío en el parque, que hacen cien mil llamadas personales del teléfono fijo, que se la pasan pegadas al celular como rémoras y la casa calléndose (que es lo más light que hacen), que se «encompinchan» con jardineros, conserjes, choferes y afines, que se golosean los hijos adolescentes (esto para mí es de terror), que ventanean la vida privada completa de la familia con quien sea que les de un poco de cuerda, hay otros cuentos de horror como: tratar de hacerce abortos en el lugar de trabajo con  brebajes que ellas mismas se preparan para ese fin y que muchas alcanzan el «éxito» de golosearse al jefe inescrupuloso, por cierto (esta especialidad la tienen unas extranjeras que provienen de muy cerquita).

Todo esto sin mencionar el selecto grupo de las que solo trabajan por una finalidad como: carnavales, semana santa, fin de año o alguna fiesta particular para lo que requieran reunir algo de dinero. Esas llegan con su plan bien trasado que incluye todo el trabajo novelistico y teatral en donde te convencen que son moscas muertas y que ellas desean trabajar para ti por el monto que puedas pagarles por el resto de tu vida sin preocupaciones. Entonces, a la semana o a la quincena o mes o dos meses vuelan y algunas ni se despiden o te mandan un fugaz mensaje de whatsapp indicándote que te dejaron tirada y les vales con palabras a veces bonitas. En ese grupo tuve una que ni sus pertenencias se llevó se fue de día libre y más nunca la vimos. (Oye verdad! Que será de esa fulana hoy día?).

Ajo!! Y no hablemos de las implicaciones legales cuando te toca despedir alguna o que ella te deja tirada pero luego se acuerda que hay un ministerio de trabajo en donde las tienen catalogadas como la mujeres más «puras y blancas» que existen en este mundo y donde el patrono es satanás y casi siempre sale jodido. Para estos cuentitos de ministerio creo que es necesario un blog especial. Jajajajajaj (me rio ahora pero como he sufrido de impotencia en algunas ocasiones).

Al final del camino y luego de 20 años en este peregrinaje y desfile de artístas por mi casa y también por la casa de muchas amigas que hemos vivido lo mismo, me quedo con la enseñanza que me dejaron las palabras de mi hijo JR (el mayor) cuando tenía apenas 6 añitos: «mami yo no extraño a ninguna de ellas, ellas solo vienen a trabajar a nuestra casa hay que tratarlas con respeto pero mi familia son ustedes y los único que quiero siempre en mi vida son ustedes, las señoras que nos trabajan no importa que se vayan unas y vengan otras», sabio e inteligente mi hijo, yo de zoqueta pensando que estaba desestabilizando la vida de mi pequeño por tener tanta gente extraña en casa y él bien clarito; esa  fue una de las primeras lecciones aprendidas de la sencillez de la cabecita de mis hijos. Después de esa vinieron muchas de los 3.

Aprendí que nadie es indispensable en esta vida aunque así lo parezca, aprendí que cuando pensaste que habías visto el último disparate hay otra que hace una atrocidad peor, aprendí que cuando una persona que pensaste era eficiente te deja tirada viene alguien mejor (ley de vida), aprendí que cada cosa ocurre por una razón, aprendí que ya las nanas y domésticas de antes que duraban miles de años se extinguieron, pero principalmente aprendí señores que son «un mal necesario» y que sería estupendo en un mundo ideal que pudiesemos aplicar toda la tecnología que tiene este mundo, que es bastante y va en avanzada, para que nosotras mismas pudiesemos trabajar desde casa y que la casa tenga mecanismos sofisticados para que los oficios fueran cosa de «apretar botones», jejejeje creo que ya me pasé, estoy cogía en el sueño y estoy divagando, mínimo quiero a robotina. Pues les comento que estoy segura que si inventaran una robotina no podrían con la demanda, la gente se endudaría, venderían hasta los carros para comprarse una.

Esa nany/doméstica daría cero problema y la programas a tu imagen y semejanza.

Este blog se lo dedico a mis dos nanas que fueron lo mejor del mundo y parte importante de la vida mia y de mi hermana hasta la fecha y a la nani de mi «flamantisimo» que dejaba de amarlo para adorarlo y todavía mi suegra y él cuentan anécdotas de aquellos tiempos que no volverán.

Por favor siganme en redes: twitter, instagram y FB como CUARENTIDIVA…

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s