Debo reconocer y confesar que para mí cumplir ha sido de unos años para acá, un saborcito agridulce; concretamente al cumplir los 30 años me sentí como que ya se acabo la chiquilla y soy una mujer, de hecho, en aquellos días ya estaba casada y tenía mi primer hijo (y me entró la meditadera), un par de años despues rematé el cuadro teniendo mi segundo hijo que aumentaba mi responsabilidad.
A la mayoría de las mujeres les entra el faracho al cumplir los 40 mas bien, pero no fue mi caso al llegar a esa edad poderosa.
Una de las situaciones que más desanima es que al cumplir 40 años + 1 día quedas más ciega que Magú; la mayoría debe salir en estampida al oculista; pero como somos divas afortunadamente existe los aros más fashion de la bolita del mundo, otras más vanidositas usan de contacto y hasta de colores, pero menos achicar los ojos para enfocar nada, eso es pecado. jejejejeje
Creo que parte de los sentimientos encontrados al llegar mi cumpleaños obedecen a que me trazo, a veces, metas un poco altas más no imposibles pero al llegar a veces no las he logrado o las he logrado a medias.
A las finales he entendido que ponga como me ponga las cosas son como son y no las puedo cambiar; que dentro de mi vida «somos los que estamos y estamos los que somos», de manera que no debo sentirme mal ni extrañar nadie porque mi felicidad no debe depender de nada no nadie.
Que las metas se van a alvanzar cuando corresponda; que si algo me mortifica y tiene solución; para qué me mortifica? Y si no tiene solución para que me mortifica?;
Que debo trabajar diario en mí para cuando me despierto hecha una «darks, vampireza, chimoltrufia etc» pueda levantar el ánimo y decir: «vamos, levanta ese trasero y a trabajar que al menos la ropa se te ve estupenda»;
Que soy única, irrepetible y perfecta para muchos que me aman empezando por el creador y yo estoy cual tonta y debo empezar a amarme desde inmediatamente YA. En la medida que me ame podré amar con intensidad a los demás.
Y lo más importante: así como un año más que se nos fue, llega uno nuevo en blanco, esperando que nosotros lo llenemos de proyectos, colores, ilusiones, metas y todo lo demás y que todavía hay cosas que hasta el momento nos parecían imposibles de conseguir y pidiendo al Cosmos,(como dice mi amiga Judy), se van dando; porque «Lo que está para tí aunque te quites y lo que no aunque te pongas».
He llegado al punto exacto y perfecto en que siento que solo deseo ir hacia arriba y hacia adelante y no deseo detenerme por nada.
Ese es mi mensaje para toda la que desee montarse en este tren aproveche mis vivencia, aprenda y evolucione.
Seamos felices y agradecidos porque a eso vinimos a esta vida terrenal. Dar lo que desees recibir porque ese es el ciclo de la vida.
Seguiré apagando mis velitas y podiendo mis deseos….
Esa es la actitud!!!
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Cada año vivido es una experiencia de aprendizaje y el que esta por vivirse pues nos deja la puerta abierta para nuevas aventuras, sueños y logros.
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